El movimiento es una de las principales características y necesidades del hombre, mantenerse activo es vital para el cumplimiento de cada objetivo, así como el trazado de cada nueva meta y en ello el deporte funge como un amigo invaluable, pues no solo se convierte en parte fundamental de una rutina positiva, sino que impulsa a ir por más.

Por ello, es de gran valor que los niños tengan la oportunidad de incorporar disciplinas deportivas a su formación, en ellas pueden encontrar no solo un hobbie sino una actividad que dará un plus a sus rutinas diarias.

Los niños no solo están prestos para adquirir conocimientos teóricos, también son capaces de desarrollar gran potencial en diversas actividades extracurriculares que además de mantenerlos en movimiento les permitirá ser más fuertes, ágiles, resistentes y por supuesto, saludables.

Lo primordial es que sea disfrutado, cada disciplina brinda experiencias diferentes pero cada una de ellas permitirá al niño adquirir habilidades físicas y psicológicas que resultarán fascinantes solo si se realizan con entusiasmo, ya que esto dará paso a la constancia necesaria para alcanzar el éxito en ellas.

Aunque si bien es cierto que es posible la práctica de diversas actividades físicas, también lo es que la dedicación es básica para que el deporte elegido muestre frutos a futuro.

El niño adquirirá destrezas físicas y cognitivas, aprenderá de la competencia positiva, del trabajo en equipo, sobre el manejo de sus emociones no solo al ganar sino al momento de perder, se proyectará a futuro y definirá un plan de acción para alcanzar sus objetivos a corto, mediano y largo plazo, pavimentando su seguridad y la automotivación, haciendo fuerte su autoestima.

Fundasitio comprende la relevancia de este tema e impulsa a través de su programa «Rinconcito Soñador» la búsqueda del autoconocimiento por medio de la autoestima, pues sin duda una de las mejores formas de crear una sana autoestima es con el deporte como puente.

Es por ello por lo que su visión de acompañamiento a niños de entre cinco y once años va de la mano con la intención de conectarlos con ese movimiento que el deporte brinda a sus vidas, permitiéndoles crecer sanos y fuertes, física y emocionalmente. ¿Ya iniciaste alguna disciplina deportiva? ¡Conecta con tu niño, nunca es tarde para iniciar!